Como alguien que ha estado involucrado con la comunidad de Parkinson durante los últimos siete años, he visto de primera mano los beneficios no solo del conocimiento que brinda la Asociación de Parkinson, sino también del sentido de comunidad que crea. He evaluado a más de trescientos luchadores contra la enfermedad de Parkinson para mi programa Rock Steady y, lo que está muy claro, es que se necesita un pueblo para combatir la enfermedad. Soy un conector de personas y programas, a menudo transmitiendo información a mis luchadores sobre los eventos de la asociación, especialistas en trastornos del movimiento, fisioterapeutas, estudios de parkinson y programas de terapia del habla, para mejorar la calidad de sus vidas. Sé que puedo ampliar mi alcance como conector en mi papel como miembro de la junta, aportando el entusiasmo que tengo para que mis luchadores no tomen el diagnóstico de brazos cruzados: hacer frente al Parkinson a través del apoyo, la actividad y la participación.